Los que suscribimos,  integrantes de la Asamblea Nacional Popular (ANP), madres y padres  de los 43 estudiantes desparecidos de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, en nuestro carácter de ciudadanos (as) y agraviados (as) por las instituciones del Estado Mexicano, en torno a la situación actual y en el marco de la coyuntura electoral,  manifestamos que hoy en día no están dadas las condiciones para que en el país se celebren las elecciones que se aproximan con una verdadera participación ciudadana por lo cual  expresamos las siguientes:

CONSIDERACIONES
  1. La inseguridad, la falta de garantías individuales plasmadas en la Constitución, la violación de los derechos humanos, el asesinato y secuestro de ciudadanos y activistas sociales, la desaparición forzada de estudiantes y la fuerte penetración del crimen organizado en el gobierno, policías y ejército parece una realidad inexistente para las instituciones públicas, para las élites gobernantes y los propios partidos electoreros que lo único que han hecho hasta ahora es preocuparse por las próximas elecciones llamando al pueblo de México a participar en jornada electoral sin que se  garantice realmente  el ejercicio de  una verdadera democracia.
  2. El sistema de partidos políticos ha caído en un fuerte descrédito entre la población. Postulan a personajes por demás inverosímiles; actrices, futbolistas y de manera general a los mismos políticos desprestigiados  de siempre. Para muchos ciudadanos el hecho de estar empadronados, no tiene que ver con la voluntad de votar, sino más bien con la necesidad de obtener una identificación oficial
  3. El estado de derecho se encuentra profundamente cuestionado por la desaparición forzada de los jóvenes normalistas de Ayotzinapa en el mes de septiembre del año pasado en la ciudad de Iguala, Guerrero, por elementos de la policía. La Federación pretende cerrar este caso para proteger los intereses de la clase gobernante, evadiendo las responsabilidades de la Presidencia de la República,  la Policía Federal Preventiva,  los Presidentes Municipales, el Ejército (cuya participación en este delito es inocultable) y los  Servidores Públicos de mediano y alto nivel del Estado de Guerrero.
  4. La inseguridad en amplias regiones de México, tiene mayor repercusión en países como Estados Unidos, España y Francia, por lo que recomienden a sus conciudadanos no visitar Estados de la República como Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Nayarit, Zacatecas, Veracruz, entre otros; la inseguridad en éstos estados es una realidad que el gobierno mexicano pasa por alto en su afán de llevar  a cabo las elecciones intermedias.
  5. Los partidos electoreros actúan como si no pasara nada, con un cinismo que raya en la desfachatez. Solo les interesa arribar al poder para seguir usufructuando la riqueza nacional sin importarles los conflictos sociales derivados de sus propias políticas.
  6. Los gastos multimillonarios que se harán en las elecciones de 2015, ofenden e indignan, lo mismo que contrastan con la miseria, el hambre, el desempleo, la inseguridad, la falta de salud, educación, etc. No hay modo de ocultar a los más de 50 millones de mexicanos en la pobreza y a los más de 26 mil desaparecidos según cifras oficiales.
  7. Las circunstancias que rodean a estos comicios tienen como antecedente un largo historial de procesos fraudulentos y escándalos por el uso de recursos de procedencia ilícita: en 2012 se presentó el bochornoso caso de las tarjetas MONEX, seis años antes, “el ahiga sido como ahiga sido” que dio paso al “calderonato”; “FOX y sus amigos” dieron, por su parte, una muestra de cómo obtener dinero de dudosa procedencia  para financiar campañas políticas incluyendo al capital extranjero sucio y  llevaron al gobierno a un presidente arrogante que no resolvió nada en los quince minutos que prometió, pero que si encumbró a su familia en puestos importantes de administración pública, lo que se tradujo en los  en grandes fraudes a PEMEX y otras dependencias y empresas del Estado. Previamente el gobierno de  Zedillo fue precedido de varios magnicidios vinculados a  purgas internas entre los políticos Priistas, lo que marco la tónica del final del gobierno ilegitimo  de Salinas y su hermano incomodo quien hoy se encuentra libre sin entregar cuentas de lo robado al pueblo mexicano.
  8. Sostenemos, finalmente, que no hay condiciones para realizar las elecciones en México, ni en Guerrero, ni en ningún otro Estado de la República. mientras no aparezcan los 43 jóvenes estudiantes normalistas de Ayotzinapa,  y los más de 26 mil desaparecidos a nivel nacional, mientras estos crímenes permanezcan impunes no se puede hablar de democracia, verdad, justicia, estado de derecho y  mucho menos de que exista la garantía de que no vuelvan a repetirse.
     Las anteriores consideraciones son parte de los elementos que dan pie a los planteamientos que se mencionan a continuación y que ponen en tela de juicio el proceso electoral actual, al grado que en algunas partes de nuestro país sólo se podrá operar dicho proceso en condiciones de guerra con el ejército y las policías de todo tipo en las calles, hecho que deslegitima por sí solo un proceso que debiera ser  fundamentalmente ciudadano.

     1.- Las graves violaciones a los derechos humanos ocurridas los días 26 y 27 de septiembre del año pasado en Iguala, Guerrero evidencian la impunidad, corrupción, desatención y falta de impulso a la Educación Pública. En estos hechos fueron la causa de la agresión sufrida por los  estudiantes de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, con un saldo de tres estudiantes ejecutados extrajudicialmente, 26 lesionados con armas de fuego y 43 normalistas secuestrados  por elementos de la policía municipal, cuyo paradero se desconoce  desde entonces, lo que constituye el delito de desaparición forzada.

     2.-Las  autoridades que  no han esclarecido lo ocurrido con  los estudiantes desaparecidos  y que mantienen en la impunidad a  los responsables materiales e intelectuales de estos crímenes, pretenden dar carpetazo a la investigación sin agotar todas las posibles líneas de investigación  buscando que los acusados y detenidos sólo enfrenten cargos del fuero común  como   los de secuestro y asesinato.  Se dejan de lado, en consecuencia, delitos como  la  tortura,  las ejecuciones extrajudiciales  y la desaparición forzada, considerados todos ellos  de  lesa humanidad en los que la responsabilidad corresponde al Estado.
     
     3.-En esta lógica de ocultar la responsabilidad de los tres ordenes de gobierno se ignora  el hecho de que los  jóvenes fueron agredidos por policías uniformados, que son Servidores Públicos, se pasa por alto, además, que  los estudiantes  fueron  monitoreados por la Policía Federal desde que salieron de Ayotzinapa hasta el momento de la agresión y que el suceso ocurrió con conocimiento y a poca distancia del 27 Batallón de Infantería del Ejército Mexicano ubicado en la Ciudad de Iguala, Guerrero.
Por todo lo anterior consideramos que el  sistema político y de partidos así como los poderes públicos son los principales responsables de la situación en el Estado de Guerrero, cualquier intento de elecciones en este lugar es una acción dolosa que no resolverá la crisis social, política y de credibilidad en los gobiernos, sino que al contrario profundizará la confrontación vulnerando aun más el tejido social que sostiene la gobernabilidad y sus instituciones, porque no existen hoy en día controles ni blindajes para evitar que con dinero ilícito se financien las campañas a puestos de elección popular.
Si no hay cordura en el gobierno las casillas electorales se instalarán bajo vigilancia del Ejército, la Policía Federal, la Policía Estatal y Municipal con el respectivo deterioro de estas instituciones que no brindan seguridad pues muchas están permeadas por el crimen organizado, como se demostró de manera fehaciente en los hechos ocurridos en Iguala, Guerrero en la comisión del ilícito de desaparición forzada de nuestros 43 hijos a manos de los policías municipales en colusión con la delincuencia organizada.
  1. El sistema electoral mexicano es uno de los más corruptos del mundo en donde aunque voten miles de ciudadanos, al final los puestos se repartirán entre los partidos que previamente acordaron sus cuotas de poder dejando al pueblo igual o peor que antes del proceso de elecciones.
     Con lo que nos lleva a preguntarnos, ¿existe la posibilidad de restablecer la credibilidad en el proceso electoral? Nuestra respuesta es clara, bajo las condiciones actuales ya mencionadas es imposible creer en el proceso electoral, para que este se restaure, primero se debe trabajar en restaurar el tejido social alejándolo de los procesos clientelares de tipo electoral, lo cual implicaría la muerte para los partidos porque ya no habría votos por despensas por citar un burdo ejemplo, pero fundamentalmente, abrir el proceso electoral a la participación organizada y directa del pueblo sin importar si son o no de un partido, el pueblo propone y el pueblo elige a los candidatos en una verdadera democracia sin simulación. Ayotzinapa y la indignación que ha concitado a nivel nacional e internacional nos obliga a pensar y reflexionar que ésta es una oportunidad histórica que puede permitir crear las condiciones para cambios pequeños, pero significativos.

     III. El espacio donde se construyen las relaciones sociales básicas, en suma donde se forja el poder, ahí donde fallaron los partidos, es evidente que éstos no pueden participar directamente en los procesos que ellos mismos vulneraron, es decir, no podemos elegir nuestros representantes a través del formato actual de elecciones, sino que tenemos que nombrar nuestros representantes bajo el régimen de usos y costumbres que está reconocido jurídicamente en las normas nacionales e internacionales, incluso se aplica en muchos municipios de nuestro país.

     Otra modalidad es el nombramiento de Consejos Populares Municipales, proponiendo que lo anterior lo lleven a cabo los Comisarios Municipales u organizaciones y personas de alta calidad moral en los Municipios, así como la población en general a través de sus asambleas populares. Es obvio que esta forma de elegir no es aplicable en muchos municipios donde se encuentra presente el conflicto social, en estos lugares se puede plantear otra figura utilizada en nuestra legislación es decir el consejo ciudadano tal cual, un consejo de administración conformado por gente reconocida de las comunidades y municipios que pueden ser electos por los ciudadanos para los puestos de gobierno del municipio para que evitar el tráfico de influencias y los nombramientos a modo del Presidente Municipal.
Por todas estas  consideraciones las organizaciones de la ANP señalamos que  no existen condiciones y  ni garantías para que en   Guerrero y en las demás de la República se lleven  a cabo las próximas elecciones federales y locales.

¡ Presentación con vida de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa! ¡Castigo a los responsables!  ¡ Presos políticos libertad! ¡ Fuera Peña Nieto !   ¡Abajo las reformas estructurales! ¡Apoyo total a los jornaleros de San Quintín B.C,! Alto a la represión contra los comerciantes de la 28 de octubre en puebla! ¡ Libertad a Néstora Salgado, Gonzalo Molina y los 5 presos de conciencia de la CNTE!
Atentamente
Comité de Madres y Padres de los 43 normalistas desaparecidos
Asamblea Nacional Popular