A la clase obrera y los trabajadores
Al campesinado pobre y los pueblos de México
Se cumple ya un año de la pérdida de nuestro camarada Gustavo Alejandro Salgado Delgado. Un año a partir de su desaparición forzada y cobarde asesinato. Un año de excusas oficiales por parte de los gobiernos del estado de Morelos y el federal. Un año de inconsistencia, vicios e irregularidades procesales que no solamente no logran satisfacer nuestra demanda de justicia, sino que más bien, son tendientes a la impunidad al liberar por supuesta falta de pruebas a los autores materiales de este artero crimen de Estado; porque, finalmente, la agresión y el asesinato perpetrado contra nuestro camarada Gustavo, ha sido una decisión y una orden del Estado Mexicano que busca acallar al pueblo trabajador en su lucha, arrebatando la libertad o la vida de sus mejores hijos.

¿Quién no logra aún ver la correlación irrebatible que existe entre los hechos de Tlatlaya, Ayotzinapa, Ayala o Apatzingán?
¿Quién puede ignorar el patrón de conducta asumido por Enrique Peña Nieto cuando fue gobernador del Estado de México y ahora desde la presidencia de la República?
¿Quién puede olvidar la represión y los presos políticos de Pela en Atenco, San Quintín, Oaxaca, Chiapas, Veracruz, Michoacán, Puebla o Guerrero?

Para nuestras organizaciones los días 3 y 4 de febrero están manchados de sangre en el calendario, pero al ser la sangre de nuestro entrañable camarada Gustavo, se ha convertido en roja tinta que marca nuestras agendas y nuestros llamamientos para la lucha clasista de los explotados.
Por que justamente en estos momentos en que el fascismo en México ha dejado de ser una “eventual amenaza” para convertirse en una realidad grotesca e innegable, los revolucionarios y comunistas estamos convencidos de la urgencia que existe para detenerlo y extirparlo por los medios que sean necesarios, antes de que éste termine por consumir las fuerzas de nuestra clase y nuestros pueblos.
En ese contexto, la imposición y aplicación de las llamadas “reformas estructurales”, la militarización del país y de su economía, la persecución y criminalización de la protesta social, el desmantelamiento y violación de los derechos civiles y humanos, el uso del aparato legal (y también ilegal) de la violencia contra el pueblo que se manifiesta y el insoportable e indecible etcétera lleno de agravios contra las masas populares, nos urgen a dar respuesta a este terrible problema que tiene sumida a la nación en el despeñadero.
No existen, sin embargo, las formulas mágicas, ni son suficientes los buenos deseos para llevar a cabo esta labor. La vía electoral no ha sido ni será suficiente para resolver este enredijo cansado y alentado por la clase en el poder. Ellos han colocado a su marioneta en “la silla”, así como mañana colocarán a otros (sea del partido electoral que sea), con los mismos o con otros métodos, para poder garantizar y administrar los intereses comunes de la burguesía.
Tampoco las acciones aisladas, por heroicas y combativas que sean, podrán jalonar tras de sí la fuerza necesaria que requiere nuestro pueblo para emanciparse a sí mismo.
Entonces, ¿Qué hacer, cuáles son los pasos a seguir?
La voz de nuestro camarada Gustavo resuena desde el corazón de la tierra, señalando las tareas que el momento actual nos dicta como la ruta toral a seguir:
I.- Construcción de un solo referente de Unidad Nacional, que una todas las voces, todas las luchas y todas las experiencias del movimiento en su conjunto en el Frente Único de Todo el Pueblo.
II.- Dotar a dicho frente de un método, un carácter y una estructura asambleísta, capaz de sintetizar en su esencia y acción, la organización insurreccional para el ejercicio del poder proletario y popular, que conduzca a los trabajadores de la ciudad y el campo a la ofensiva contra sus enemigos de clase. ¡Debemos trabajar por construir la Asamblea Nacional del Proletariado y los Pueblos de México!
III.- Desarrollar un plan de trabajo y un plan de acción únicos, que organicen, preparen y desaten la movilización y el vendaval popular, ejercitando la disciplina, la cohesión, la combatividad y la capacidad organizativa de los explotados en acciones reivindicativas, demostrativas, de boicot, etc. hasta estallar como un solo torrente revolucionario, la Huelga Política General, echando abajo las reformas antipopulares y el odioso régimen de terror y despojo que se ha enquistado sobre las espaldas del pueblo trabajador.
Compañeros y compañeras:
La base material y objetiva para llevar a cabo lo anterior, existe y se extiende con rapidez por todo el territorio nacional, y esto se observa en el surgimiento de nuevas luchas y nuevos esfuerzos organizativos de nuestro pueblo. ¡No podemos contentarnos con saludar simplemente estas luchas justas!
¡Debemos esforzarnos por unificar y concatenar cada reivindicación, cada batalla y cada proclama de los trabajadores y del pueblo en lucha dando materialidad a la consigna: Ni una lucha aislada más!
Por ello, en el marco del primer aniversario luctuoso de nuestro camarada Gustavo, el Frente Popular Revolucionario y el Partido Comunista de México (marxista-leninista) saludamos con acciones enérgicas su memoria y rendimos homenaje a su inmortal ejemplo izando las banderas rojas de la hoz, el martillo y la estrella de norte a sur de este a oeste del país, del campo a la ciudad, del barrio a la escuela, de la fábrica al hospital, en la libertad y en la prisión y en cada rincón donde nos encontramos los revolucionarios y comunistas.

Tampoco olvidamos a nuestros camaradas encarcelados en las prisiones de Miahuatlán, Ixcotel, Etla, Villa de Aldama y Tepic, junto a todos ellos, levantamos nuestros puños exigiendo su inmediata liberación.
Es cierto que hemos resentido la pérdida de Gustavo Salgado, el encarcelamiento de Javier Aluz y de todos los demas camaradas dispersos en los distintos CERESOS y CEFERESOS arriba mencionados. Es verdad también que la herida por la desaparición forzada de Gregorio Alfonso Alvarado y Lauro Juárez, a pesar de los años, aún claman por justicia, lo mismo que por todos aquellos militantes nuestros que han caído en el combate, pero nuestras organizaciones están hechas de acero, ¡Están templadas como el acero mismo y no hay fuerza capaz de detener su empuje y su arraigo entre el pueblo explotado!

Por ello realizamos nuestra Jornada Nacional de Lucha que inició el 26 de enero y culmina el 4 de febrero exigiendo:

  • Alto a la represión y persecución contra nuestras organizaciones
  • La libertad inmediata e incondicional de nuestros veintiocho camaradas presos
  • Presentación con vida de los desaparecidos y justicia para las víctimas del terrorismo de Estado.
  • Abrogación de las reformas estructurales

¡JUSTICIA PARA GUSTAVO SALGADO!
¡Castigo para los asesinos de nuestro camarada Gustavo Salgado!
¡Ha llegado el momento ideal para ahuyentar para siempre el negro vuelo del fascismo!
¡Por el Frente Único del Todo el Pueblo!
¡Por la Asamblea Nacional del Proletariado y los Pueblos de México!
¡Por la Huelga Política General!
Combativamente
¡Unidad de todo el pueblo por la emancipación proletaria!
¡Proletarios de todos los países, uníos!
COMITÉ CENTRAL DEL FRENTE POPULAR REVOLUCIONARIO
COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE MÉXICO (MARXISTA- LENINISTA)